Page 119 - Selva Fin Del Mundo
P. 119

117

















                                                                                                                                      Según la tradición, abrazar el tronco del alerce abuelo es
                                                                                                                                      sinónimo de bienestar y salud. Este gigante es testigo
                                                                                                                                      de la sinuosa historia del hombre: con sus 3.613 años,
                                                                                                                                      es  uno  de  los  ejemplares  más  longevos  del  mundo.
                                                                                                                                      Admirar sus casi 50 metros de altura es conectarse con
                                                                                                                                      la humanidad y con todo lo que nos rodea. Sin lugar a
                                                                                                                                      dudas, estar frente a esta mágica especie representa
                                                                                                                                      una de las experiencias más conmovedoras que tiene
                                                                                                                                      la región.

                                                                                                                                      Con no más de 40 cm de altura, el pudú (Pudu puda) es
                                                                                                                                      uno de los ciervos nativos más pequeños del mundo.
                                                                                                                                      Su  cuerpo  de  casi  10  kg  está  cubierto  por  un  denso
                                                                                                                                      pelaje  de  color  café  rojizo,  al  nacer  presenta  rayas
                                                                                                                                      blanquecinas en el dorso que van desapareciendo a lo
                                                                                                                                      largo de los meses. El macho se distingue de la hembra
                                                                                                                                      por  sus  pequeñas  cornamentas  no  ramificadas  de
                                                                                                                                      hasta 10 cm de largo. Si tenemos suerte, lo podemos
                                                                                                                                      avistar en claros del bosque donde disfruta pastando
                                                                                                                                      siempre atento a cualquier perturbación.

                                                                                                                                      Tradition says that holding the trunk of a millennia
                                                                                                                                      larch is synonym of health and welfare. This giant has
                                                                                                                                      witnessed the winding history of Men: with its 3,613
                                                                                                                                      years, it is one of the oldest specimens in the world. To
                                                                                                                                      admire its near 50 m height is to connect with humanity
                                                                                                                                      and with everything that surround us. Without a doubt,
                                                                                                                                      to be in front of this magical species represents of the
                                                                                                                                      most touching experiences in the region.

                                                                                                                                      The pudú  (Pudu  puda),  with  no  more than  40 cm
                                                                                                                                      height and weighing no more than 10 kg, is covered
                                                                                                                                      by a thick reddish, brown fur, even though at birth it
                                                                                                                                      presents  white stripes on  the back that  gradually
                                                                                                                                      disappear during their first months of life. You can tell
                                                                                                                                      the male apart from the female because of its small
                                                                                                                                      unbranched antlers, that are no more than 10 cm long.
                                                                                                                                      If we are lucky, we can see it in the clears of the forest
                                                                                                                                      where it grazes, always attentive to any disturbance.
                                                                                     Un tímido Pudú (Pudu puda), el más pequeño de los ciervos de América
                                                                                                 A shy Pudú (Pudu puda), the smallest deer in America
   114   115   116   117   118   119   120   121   122   123